Gracias Emilio por colaborar con el "Clasico del Lunes...!!!"
Un gaucho matrero, vago y mal entretenido, grandote de l.98 m. de altura y
Un día en un boliche tomando vino, luego de beber varias horas, se emborrachó. Nadie se animaba a decirle nada, ni el bolichero, que lo soportó para cerrar hasta altas horas de la madrugada.
Salió del boliche, subió a su caballo rumbo al rancho, pero era tal el "pedalín" que al rato se cayó del equino y se durmió en el suelo, despertándose al mediodía.
Notando que le faltaba su hermosa rastra, volvió al boliche y allí vio apoyado en la barra (llena de otros gauchos machos de pura cepa) a un gauchito flaquiiiito, petisiiiito, tomando una naranjada y luciendo su hermosa rastra, que le quedaba visiblemente grande.
Despacito, el matrero se le fue acercando, y le preguntó de un tirón arrastrando las palabras:
- Hermosa rastra, es suya?
- Sí, contestó el gauchito.
- Y... Dígameeé si no es molestia, la compró? dijo el grandote...
- No.
- La heredó?
- No.
- Bueno, si no se ofende, siguió el matrero ya saboreando su triunfo, me dice cómo la consiguió?
- Le diré mi amigo, dijo el gauchito bien fuerte y con orgullo:
Yo venía temprano al boliche a tomar un refresco, cuando a mitad de camino encontré a un gaucho culo para arriba, borracho y dormido. Le rompí el culo... y le robé la rastra.
Por qué pregunta? Es suya?
Nooooo... Yo preguntaaaba nomaaás!!!